Partidazo en el Chesapeake Energy Arena de Oklahoma City que tuvo emoción en los minutos finales del encuentro, y eso que el partido se mantuvo con clara ventaja en el marcador para los locales durante casi todo el partido.
En el primer cuarto se vió a unos Thunder superiores en todos los aspectos del juego, sobre todo en los emparejamientos Westbrook-Nash y Durant-Metta. Además una jugada desafortunada entre Kobe Bryant y Thabo Sefolosha mandaba al primero al vestuario con un fuerte dolor en el codo derecho. Los Lakers solo eran capaces de anotar desde la linea de tiros libres, y los Thunder poco a poco iban abriendo brecha. La defensa de los Lakers era de broma, tal fue así que el marcador al descanso era de 28-37 para los locales.
El segundo periodo no iba a mejorar la defensa de los visitantes, que en cuanto Oklahoma movía el balon con velocidad hacía aguas. La mayor ventaja en el marcador por parte de los Thunder vino de la mano de la segunda unidad, que era superior a los Kobe, Howard, Nash... formada por Derek Fisher (gran partido del base), Reggie Jackson, Kevin Martin, Ronnie Brewer y Nick Collison. Solo Kobe Bryant (que ya había vuelto del vestuario) conseguía hacer frente a sus contrincantes, llegando al final de este cuarto con 16 puntos (10 de ellos en este periodo), dejando ver que no se iba a rendir en ningún momento. Aún así, los Thunder llegaban al descanso con una ventaja de 55-71, consiguiendo la mayor anotacíon esta temporada después de los primeros dos cuartos. Para los Lakers también significó la mayor puntuación encajada a estas alturas de partido en toda la temporada.
Pero al volver del descanso los Thunder se confiaron, y bajaron su intensidad en el juego. Por su parte los Lakers defendieron un poco mejor y gracias a Kobe Bryant, que anotó 12 puntos en este cuarto, los Lakers se acercaron en el marcador, llegando a disminuir la desventaja a tan solo 6 puntos. Pero en este momento apareció Russel Westbrook, que se lo pegaba todo absolutamente, pero le entraba, con lo que consiguió que los Lakers no se acercaran más. Se llegó así al último cuarto con un marcador de 89-97.
Al comienzo del periodo final, los Lakers siguieron mejorando su defensa y Kobe siguió inspirado. Los Thunder estaban nerviosos y ansiosos, tal es así que fallaron tiros cómodos y tan solo Derek Ficher parecía poner calma. Todo esto llevó a que la ventaja de los locales fuera solo de 5 puntos (105-110). Pero en este momento Oklahoma se tranquilizó, comenzó a mover el balón y con un triple de Ibaka sumado a una racha de 10-0, mataron el partido. El marcador final fue de 105-122.
Hay muchas conclusiones que se sacan de este partido. Para empezar Los Ángeles Lakers demuestran que son capaces de ganar a cualquier rival, pero su irregularidad a lo largo de un partido hace que se pueda confiar poco en ellos. También da la sensación de que Kobe Bryant es el único jugador capaz de anotar en los momentos difíciles, y eso que a su alrededor tiene jugadores como Steve Nash y Dwight Howard, que hizo un partido para olvidar, casi sin participación y sin involucrarse, tal es así que solo consiguió 6 puntos en todo el partido con 1/7 en TC. Además, aunque Mike D'Antoni piense lo contrario, este equipo echa de menos a Pau Gasol, ya que él si es capaz de jugarse canastas decisivas, por lo que cuanto antes vuelva mejor para los angelinos. Por último quizás lo más importante, la defensa. Estos Lakers no defienden nada, y tendrán que mejorar mucho en ese aspecto si quieren llegar a Playoffs y ser competitivos.
El MVP del encuentro fue Russell Westbrook (como dijimos en la previa), que además de parecer en los momentos importantes consiguió nada menos que 37 puntos, con 10 rebotes, 5 asistencias y 2 robos. Kevin Durant también hizo un gran partido llegando a los 26 puntos, 9 rebotes, 5 asistencias y 5 robos. Por parte, de los Lakers destacar a un gran Kobe Bryant, que aún mostrando durante todo el partido signos de dolor en su codo derecho, se echó el equipo a la espalda, anotando 30 puntos. Hay que destacar la labor de Steve Nash que llegó a los 20 puntos, aunque en los instantes finales no estuvo a la altura.
Por último un record, el de pérdidas. O mejor dicho, no pérdidas, y es que Oklahoma batió anoche su record de menos pérdidas en un partido con tan solo ¡2! en todo el encuentro.
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